Sabes que tienes uno preferido. Ése que hace que tu estómago gruña con sólo mirarlo. Ése al que le querrías hincar el diente. Puede que sea uno de pastrami caliente con pan de centeno y mostaza picante, o quizás te guste más el queso a la parrilla. O cabe la posibilidad de que no te puedas resistir a un french dip con carne suave y jugosa en una baguette… Sí, ÉSE.
En países como Estados Unidos se comen cerca de 200 sándwiches de media cada año, así que es probable que tengas uno favorito. Sea cual sea el sándwich que te haga más feliz, los componentes básicos deben ser los mismos.
El diccionario de la Real Academia Española define un sándwich como un “emparedado hecho con dos rebanadas de pan de molde entre las que se coloca jamón, queso, embutido, vegetales u otros alimentos”. Parece un concepto lo bastante sencillo. Ahora bien, ¿quién inventó el sandwich? Aunque estoy seguro de que al Conde de Sandwich le gustaría llevarse todo el crédito, la verdadera historia del sándwich se remonta mucho más en el tiempo.
La mayoría hemos oído hablar del cuarto Conde de Sandwich, también conocido como John Montagu. A finales del siglo XVIII, el escritor francés Pierre-Jean Grosley relató sus observaciones de la vida inglesa en un libro llamado “Londres”, en el que escribió unas pocas líneas que asociaron para siempre la invención de este plato al Conde de Sandwich:
“Un ministro de estado se pasó veinticuatro horas en una mesa de apuestas, tan absorto en el juego que, durante todo el tiempo, no recurrió a otro sustento que un trozo de carne entre dos rebanadas de pan tostado, que se comió sin dejar de jugar en ningún momento. Este nuevo plato se puso rápidamente de moda durante el tiempo que viví en Londres; se llamaba por el nombre del ministro que lo inventó.”
Aunque no está claro si esta anécdota es totalmente cierta, el libro ganó en popularidad y la historia se asentó. Pronto el nombre se hizo oficial: cuando comías dos trozos de pan con algo entre ellos, estabas comiendo un “sándwich”.
A Edward Gibbon, autor de “La Historia de la Decadencia y Caída del Imperio Romano”, se le reconoce el ser la primera persona en poner por escrito la palabra “sándwich” según su contexto culinario moderno. El 24 de noviembre de 1762, escribió en su diario:
“Ese respetable organismo, del que tengo el honor de ser un miembro, se permite todas las tardes un verdadero espectáculo inglés. Veinte o treinta, quizás, de los principales hombres del reino en cuanto a elegancia y fortuna, cenando en pequeñas mesas cubiertas con una servilleta en medio de la cafetería, con un poco de carne fría, o sándwich, y bebiendo un vaso de ponche.”
En la época en la que se escribió esta anotación de diario, Gibbon era Primer Lord del Almirantazgo. El Conde de Sandwich, Montagu, estaba arraigado en el ámbito social londinense. Es posible que Montagu introdujera el concepto del sándwich a sus amigos de la alta sociedad de Londres, incluyendo Gibbon, que ayudó a que ganara notoriedad rápidamente.
En 1773, la palabra sándwich se usó en una receta por primera vez en el libro de cocina de Charlotte Mason titulado… “El Ayudante de las Damas para Controlar y Proveer su Mesa: Sistema de Cocina Completo, que Contiene Ciento Cincuenta Menús Seleccionados”. Ésa es la versión resumida del título, aunque parezca mentira.
Aunque el Conde de Sandwich (o, quizás, su cocinero/a) merece el reconocimiento de ayudar a que los sándwiches tuvieran un nombre y se hicieran más populares, han existido variaciones de este concepto durante siglos. Resulta complicado señalar exactamente cuándo o dónde apareció por primera vez. Los trabajadores de las granjas de la Francia rural habían estado comiendo carne entre rebanadas de pan desde mucho antes de que tuviera un nombre, aunque es probable que el sándwich surgiera incluso antes.
El sándwich reconocible más antiguo podría ser el Korech o “sándwich Hillel”, que se comía durante la Pascua Judía. Hillel el Anciano, un líder judío y rabino que vivía en Jerusalén en la época del Rey Herodes (alrededor del 110 a. C.), sugirió comer hierbas amargas en el interior de un pan ácimo llamado matzá. Las hierbas simbolizaban la amargura de la esclavitud, y el pan recordaba a los panes sin levadura que los antiguos israelitas elaboraban de forma apresurada cuando huían de Egipto. La sencilla recomendación de Hillel de hacer un sándwich con estos dos ingredientes podría indicar que ya era una manera popular de servir la comida en Oriente Medio.
A finales de la década de 1920, cuando Gustav Papendick inventó una manera de cortar el pan en rebanadas y empaquetarlo, los sándwiches encontraron una nueva audiencia. Las madres podían preparar un sándwich sin tener que cortar el pan, y los niños podrían hacerse sus almuerzos de manera segura sin tener que utilizar un cuchillo. La portabilidad y sencillez de los sándwiches hizo que se pusieran de moda entre las familias, y el sándwich se convirtió en un elemento básico de los comedores.
El legado del Conde de Sandwich vive en la actualidad en más que el nombre. El tatara-tatara-tatara-tatara-tatara-tatara tataranieto de John Montagu, Orlando Montagu, fundó una cadena de restaurantes de sándwiches llamada (¿cómo se iba a llamar si no?) Conde de Sandwich (Earl of Sandwich). El menú incluye un homenaje al primero y más famoso sándwich del Conde, llamado el “Original 1762”, que está hecho con carne asada caliente, queso cheddar fuerte, y una cremosa salsa de rábanos picantes, todo ello servido con pan caliente.
Hoy en día los sándwiches son populares en todo el mundo, y parece que cada zona tiene su propia versión del concepto. En Cuba, los restaurantes sirven jamón y queso en pan cubano. En Oriente Medio, el falafel o el shawarma en un envoltorio de pan pita es la comida rápida preferida. En Francia, se puede encontrar un croque-monsieur o un croque-madame en la mayoría de los bares. En Italia, la norma son los simples y rústicos sándwiches panino. En Nueva York, el rey es el pastrami con pan de centeno, aunque el Reuben le sigue de cerca. En Filadelfia, todo lo acapara el cheesesteak. Existen infinitas variedades de sándwiches, haciendo que sean una de las comidas más populares en todo el mundo.
Así que venga, ¡suéltalo ya! ¿Cuál es tu tipo preferido de sándwich?