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Un barómetro es un instrumento para medir la presión atmosférica. Existen dos tipos comunes, que son el barómetro aneroide y el barómetro de mercurio (que fue inventado primero). Evangelista Torricelli fue quién inventó el barómetro por primera vez, y fue conocido como el “tubo de Torricelli”.
BIOGRAFÍA – EVANGELISTA TORRICELLI
Evangelista Torricelli nació el 15 de octubre de 1608 en Faenza (Italia) y murió el 22 de octubre de 1647 en Florencia (Italia).
Fue físico y matemático. En 1641, Evangelista Torricelli se mudó a Florencia para ayudar al astrónomo Galileo.
EL BARÓMETRO DE MERCURIO
Fue Galileo quien sugirió a Evangelista Torricelli usar mercurio en sus experimentos con el vacío. Torricelli llenó con mercurio un tubo de vidrio de 1 metro de largo y le dio la vuelta colocándolo en el interior de un plato. Parte del mercurio no se salió del tubo, y Torricelli observó que se creaba un vacío.
Evangelista Torricelli se convirtió en el primer científico en crear un vacío de forma prolongada y en descubrir el principio de funcionamiento del barómetro. Torricelli se dio cuenta de que la variación de la altura del mercurio de un día para otro estaba provocada por los cambios en la presión atmosférica. Así, Torricelli inventó el primer barómetro de mercurio alrededor del año 1644.
EVANGELISTA TORRICELLI – OTRAS INVESTIGACIONES
Evangelista Torricelli también escribió sobre la cuadratura de la cicloide y las cónicas, las rectificaciones de la espiral logarítmica, la teoría del barómetro, el valor de la gravedad (hallado al observar el movimiento de dos pesos conectados por una cuerda que pasaba por una polea fija), la teoría de los proyectiles y el movimiento de los fluidos.
LUCIEN VIDIE – BARÓMETRO ANEROIDE
En 1843, el científico francés Lucien Vidie inventó el barómetro aneroide, que “registra el cambio en la forma de una cápsula a la que se le ha hecho el vacío para medir variaciones en la presión atmosférica”. Aneroide significa sin fluido, sin usar líquidos, ya que la cápsula de metal suele estar hecha de bronce fosforoso o de cobre-berilio.
Tipos de Barómetros
1. Barómetro de mercurio
El barómetro de mercurio es el tipo de barómetro más antiguo, inventado por el físico italiano Evangelista Torricelli, quien llevó a cabo sus primeros experimentos barométricos usando un tubo de agua. El agua tiene un peso relativamente ligero, así que había que usar un tubo muy alto con una gran cantidad de agua para compensar el mayor peso de la presión atmosférica.
El barómetro de agua de Torricelli tenía más de 10 metros de altura, ¡por lo que se elevaba por encima del tejado de su casa! Este raro dispositivo provocó sospechas entre los vecinos de Torricelli, quienes pensaban que hacía brujería. Para mantener sus experimentos bajo un mayor secreto, Torricelli dedujo que podría construir un barómetro mucho más pequeño usando mercurio, un líquido plateado que pesa 14 veces más que el agua.
Un barómetro de mercurio tiene un tubo de vidrio cerrado por la parte superior y abierto por la inferior. Debajo del tubo hay un plato circular y poco profundo que rodea el tubo y que contiene mercurio. De esta manera, el mercurio del tubo se ajustará por sí solo para igualar la presión atmosférica que hay sobre el plato. A medida que la presión aumenta, fuerza al mercurio a subir por el tubo, que está marcado con una serie de medidas para registrar la cantidad de atmósferas o bares. Los observadores pueden decir cuál es la presión del aire viendo dónde se detiene el mercurio del barómetro.
2. Barómetro aneroide
El científico francés Lucien Vidi inventó el barómetro aneroide, que posee un compartimento metálico sellado que se expande y se contrae, dependiendo de la presión atmosférica que lo rodea, y unos mecanismos que miden dicha expansión o contracción, alineándola con una determinada cantidad de atmósferas o bares.
El barómetro aneroide tiene un indicador que muestra la cantidad actual de atmósferas, de forma similar a un reloj. Una manecilla se mueve en sentido horario o antihorario para señalar la cantidad de atmósferas en un momento dado. Los términos “tormentoso”, “lluvia”, “variable”, “bueno” y “seco” suelen estar escritas sobre los números de la esfera para facilitar a la gente la interpretación del tiempo. Los barómetros aneroides sustituyeron lentamente a los de mercurio debido a que eran más sencillos de utilizar, más asequibles y más fáciles de transportar, dado que no tenían ningún líquido que se pudiera derramar.
Algunos barómetros aneroides usan una herramienta mecánica para registrar los cambios en la presión atmosférica a lo largo de un periodo de tiempo. Estos barómetros aneroides se llaman barógrafos, que son barómetros conectados a agujas que hacen marcas en un rollo de papel cuadriculado adyacente. El barógrafo registra la cantidad de atmósferas en el eje vertical, y la unidad de tiempo en el horizontal. La herramienta de registro del barógrafo da vueltas, normalmente una vez al día, a la semana o al mes. Los picos en el gráfico muestran los momentos en los que la presión del aire estaba alta o baja, y durante cuánto tiempo. Por ejemplo, una tormenta severa se vería en un barógrafo como un valle profundo y ancho.
3. Barómetros digitales
Los barómetros digitales actuales miden y muestran datos atmosféricos complejos de manera más precisa y rápida que nunca antes. Muchos barómetros digitales muestran tanto la lectura barométrica actual como las lecturas de hace 1, 3, 6 y 12 horas en un gráfico de barras, de manera parecida a un barógrafo. También tienen en cuenta otras lecturas atmosféricas como el viento y la humedad, para así realizar previsiones meteorológicas precisas. Estos datos se archivan y se guardan en el barómetro, y también pueden descargarse a un ordenador para poder realizar más análisis. Los barómetros digitales son usados por meteorólogos y otros científicos que quieran obtener lecturas actualizadas sobre la atmósfera cuando realizan experimentos en el laboratorio o sobre el terreno.
Actualmente, el barómetro digital es una herramienta importante en muchos smartphones. Este tipo de barómetro digital utiliza datos sobre la presión atmosférica para realizar lecturas precisas de la elevación, las cuales ayudan al receptor GPS del smartphone a señalar una ubicación de manera más precisa, mejorando enormemente la navegación.
Además, los desarrolladores e investigadores están usando las capacidades de los smartphones para realizar previsiones meteorológicas más precisas. Aplicaciones como PressureNet recopilan de manera automática medidas barométricas de cada uno de sus usuarios, creando una vasta red de datos atmosféricos, la cual hace que sea más sencillo y rápido hacer el seguimiento del desarrollo de las tormentas, sobre todo en zonas con pocas estaciones meteorológicas.